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Una amenaza creciente: el crimen organizado transnacional en las Américas

20 de junio de 2025 | Actividad

Nuevas rutas. Nuevos delitos. Nuevas alianzas criminales. El crimen organizado en las Américas y el Caribe se transforma y multiplica sus formas de operar, desbordando las respuestas institucionales tradicionales y aprovechando los puntos ciegos jurídicos e institucionales. Frente a este escenario, los parlamentos del hemisferio se enfrentan al imperativo de renovar sus marcos legislativos y reforzar la cooperación internacional a fin de organizar respuestas más eficaces y articuladas, que estén a la altura de la rapidez y complejidad de la amenaza.

Con este telón de fondo, ParlAmericas inauguró su serie de diálogos interparlamentarios con miras a la X Cumbre de las Américas con el evento virtual El panorama cambiante del crimen organizado transnacional, que reunió a legisladoras, legisladores y especialistas de toda la región.

En sus palabras inaugurales, el senador Germán Blanco de Colombia, segundo vicepresidente de ParlAmericas, subrayó la responsabilidad de los parlamentos de adaptarse a una realidad criminal en constante mutación, y llamó la atención sobre la creciente diversificación de actividades delictivas, que va más allá de los delitos tradicionales y se entrelaza con redes transnacionales cada vez más complejas.

Entre los patrones emergentes más preocupantes se identificaron la convergencia entre crimen organizado y flujos migratorios irregulares, el uso de armas como forma de pago en transacciones ilícitas y el crecimiento sostenido de delitos ambientales como fuente de financiamiento para redes criminales. Estos fenómenos, expuso Christopher Hernández-Roy, director adjunto e investigador principal del Programa de las Américas del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS), al tiempo que complejizan la actividad delictiva, exigen reforzar el intercambio de inteligencia, desmantelar las redes financieras y establecer controles más eficaces sobre precursores químicos, en el marco de una cooperación internacional reforzada, en particular en materia de seguridad fronteriza y legislativa.

Frente a esta diversificación del crimen, se destacó la necesidad de adoptar enfoques integrales. El Marco Estratégico de Seguridad y Justicia para el Desarrollo del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF), presentado por Lea Giménez, asesora del presidente ejecutivo del Banco, propone una respuesta articulada basada en la prevención, el desarrollo económico, la resiliencia comunitaria y el fortalecimiento institucional, especialmente en contextos de alta vulnerabilidad.

Desde una perspectiva humanitaria, Tonni Brodber, jefa de Secretaría del Fondo de Mujeres para la Paz y la Acción Humanitaria (WPHF) propuso ampliar el concepto de conflicto para incluir la violencia criminal, que en las Américas y el Caribe deja más víctimas que muchos conflictos armados. También se subrayó el impacto desproporcionado de la violencia criminal sobre mujeres, niñas y jóvenes, y en el potencial de apoyar respuestas comunitarias lideradas por mujeres, respaldadas desde los parlamentos, como vía para romper ciclos de violencia. En esta línea, la diputada dominicana Nelsa Shoraya Suárez, quien moderó el panel y el debate, enfatizó la urgencia de avanzar en reformas normativas, como la reforma penal actualmente en curso en su país, frente a la modernización y diversificación de actividades del crimen organizado.

Estos análisis fueron complementados por las y los participantes quienes compartieron experiencias nacionales y coincidieron en la creciente gravedad de estas dinámicas criminales y en la necesidad urgente de fortalecer las respuestas legislativas a través de una coordinación interparlamentaria más estrecha que permita avanzar en soluciones conjuntas y sostenidas.

El papel del sistema interamericano en la respuesta a estas amenazas también ocupó un lugar central en el diálogo. María Celina Conte, directora de la Secretaría de la Cumbre de las Américas de la OEA, subrayó que la seguridad será uno de los ejes prioritarios de la próxima Cumbre de las Américas, que se celebrará en Punta Cana, y que el Grupo de Trabajo Conjunto de Cumbres, conformado por organismos regionales e internacionales como CAF, ofrece una plataforma técnica y estratégica clave para acompañar a los países en el desarrollo de soluciones integrales. Asimismo, destacó el mandato de ParlAmericas para promover la participación parlamentaria como parte integral del Proceso de Cumbres.

En este marco, se valoró la Cumbre como espacio para movilizar voluntad política y canalizar esfuerzos coordinados, así como el aporte de ParlAmericas para asegurar que los debates intergubernamentales reflejen prioridades legislativas y ciudadanas. Al subrayar la necesidad de respuestas multilaterales a los desafíos de seguridad, la embajadora Mayerlyn Cordero Díaz, representante permanente de la República Dominicana ante la OEA, destacó que avanzar hacia soluciones efectivas requiere integrar un enfoque de derechos humanos en la legislación y fortalecer la cooperación entre poderes del Estado y con los mecanismos del sistema interamericano.

Este evento fue posible gracias al apoyo del Gobierno de Canadá, a través de Asuntos Globales Canadá.